En tiempos coloniales, los charros, nuestro equivalente de los vaqueros, eran principalmente mestizos y algunos indígenas nobles que tenían el privilegio de montar a caballo con sus bellísimos trajes hechos de lana con aplicaciones en piel recortada a mano, técnica que se conoce como calado.
Sirve como protección para que la fricción de la cuerda no rompa la tela del traje a la hora de lazar la vaca desde el caballo.Los trajes tradicionales de charrería se utilizan cada año en la comunidad de Chimalhuacán, Estado de México.
Colores, Texturas & Pre-Orden
Nuestros productos están hechos en colaboración creativa y productiva con artesanos de México. Su elaboración involucra procesos manuales que generan variaciones en colores y texturas. Es importante notar que el color real de la prenda puede variar con respecto al color que se muestra en pantalla.
Para productos o variantes que se se encuentren disponibles únicamente sobre pedido (pre-orden) pedimos que se consideren 3 a 4 semanas de producción, adicional al tiempo de envío.
